¿Quieres viajar a Islas Baleares? ¡No te pierdas estos 10 planazos para disfrutar al máximo de tu viaje a Baleares!
Viajar a islas Baleares es un planazo que va más allá de tomar el sol en la costa turquesa y cristalina del Mediterráneo.
El archipiélago se compone de las islas de Ibiza, Mallorca, Menorca, Formentera, y de la tantas veces olvidada isla Cabrera.

Estas cuatro islas, que en realidad son cinco, encierran un sinfín de posibilidades: desde ciudades antiguas, faros y recorridos en tren, hasta paisajes imposibles, naturaleza surreal y, claro, una gastronomía característica aderezada con una buena dosis de fiesta.
Las primeras tres cuentan con aeropuerto propio, mientras que a todas (menos a Cabrera) puedes llegar en uno de los ferries que salen regularmente desde Barcelona o de Valencia. ¡Es muy fácil viajar entre islas Baleares!
¿Te vienes de viaje a Baleares?
10 Planazos para viajar a Islas Baleares y disfrutar al máximo
Experiencias en Ibiza
1. Navegar en velero por la costa de Ibiza
Seguro has oído hablar de Ibiza: una isla asociada casi siempre con la noche, la fiesta y los festivales que, además, cuenta con 210 kilómetros de costa y más de 50 playas (y unos 300 días de calor al año).
Por supuesto, no podrás visitarlas todas en apenas unos días. ¿La solución? ¡Un velero!
Una de las mejores opciones es alquilar un velero para recorrer la costa ibicenca a tu gusto. ¡Navegar a vela es un placer y te da mucha libertad!
Además, puedes comer allí, disfrutar de los mejores lugares para hacer snorkel o buceo, llegar a las mejores calas, disfrutar de los atardeceres, o simplemente relajarte mientras navegas al ritmo de las olas y conectas con el mar.

Lo que, es más: si no sabes navegar (o si no te sientes 100% seguro navegando por tu cuenta), puedes alquilar un velero con tripulación o con patrón.
Los puntos destacados de la costa de Ibiza son las calas de Jondal beach, D´Hort (aquí verás los mejores atardeceres), Salada, Comte, Bassa, y el misterioso islote de Es Vedrá.
Además, si el viento te lo permite, puedes ir a pasar el día a la vecina isla de Formentera.
2. Recorrer las calles de Dalt Vila: el barrio antiguo de Ibiza
Vale, te has bajado del velero con ganas de mover las piernas. Antes de irte de fiesta, date una vuelta por el casco antiguo amurallado de la capital ibicenca, considerada por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.
Nada más atravesar el Portal de Ses Taules te adentrarás en un tiempo pasado, en un camino de adoquines que te llevará a la Plaza de Vila.
Desde allí, podrás recorrer cada rincón de Dalt Vila, como el Castillo de Ibiza o los Baluartes de San Jaime, de Santa Lucia, o de San Jorge.

3. Irte de fiesta en Ibiza
Viajar a Islas Baleares o, en concreto, viajar a Ibiza, quedaría un tanto incompleta sin vivir la experiencia de la noche ibicenca.
Algunas de las discotecas más famosas, como Pachá y Amnesia, se encuentran en (o alrededor de) la ciudad de Ibiza, pero otra zona muy popular para irte de copas en Ibiza es San Antonio, a apenas 16 kilómetros de la capital, en donde, además, encontrarás algunos de los alojamientos más económicos de la isla.
Experiencias en Mallorca
4. Explorar las Cuevas del Drach
¿Te imaginas caminar por 1.200 metros de senderos a 25 metros de profundidad?

Eso, aderezado con uno de los espacios más surreales que la naturaleza ha logrado conjurar, es lo que encontraras en las Cuevas del Drach, en Porto Cristo, al este de la isla de Mallorca. Uno de las mejores experiencias que vivir en tu viaje a Baleares.
El sendero te llevará entre estalactitas y estalagmitas, entre ríos subterráneos y extrañas formaciones rocosas, hasta el Lago Martel, donde podrás pasear en barca y disfrutar de un concierto de música clásica con efectos luminosos (sí, ¡dentro de la cueva!).
5. Viajar a bordo del Tren de Soller
Si estás planeando una escapada de fin de semana a Palma de Mallorca, no pierdas la oportunidad de dedicarle un día a viajar a bordo del Tren de Soller, una línea ferroviaria inaugurada en 1912 que conecta a la capital mallorquina con el pueblo de Soller, en el norte de la isla.

En el traqueteante recorrido de una hora (¡los vagones son de madera!), pasarás por olivares, puentes, miradores, túneles y viaductos, a través de buena parte de la Sierra de Tramontana.
Una vez en Soller, no dejes pasar la oportunidad de tomarte el tranvía hasta el Puerto de Soller, donde podrás disfrutar de un día de playa y de una abundante oferta gastronómica.
6. Viajar al archipiélago de Cabrera
Puede que quieras viajar a Islas Baleares en busca de fiesta (y seguramente la encuentres en Palma de Mallorca o en Ibiza), pero si lo que buscas es paz, tranquilidad y paisajes vírgenes, entonces debes apuntar tu GPS al archipiélago de Cabrera.

Este archipiélago ubicado a unos 19 kilómetros de la localidad mallorquina de Colonia de Sant Jordi, desde donde salen los barcos que llevan la isla de Cabrera, se compone en realidad de 18 islotes.
Su exuberante naturaleza abundante de peces y aves, y sus playas prácticamente vacías, hacen al archipiélago una opción perfecta para pasar el día lejos de las multitudes que la temporada alta suele atraer a las calas más populares de Mallorca.
Experiencias en Menorca
7. Camina por el Camino de los Caballos
El Camino de los Caballos (Camí de Cavalls) es un antiguo sendero de 185 kilómetros que circunvala la isla.
A lo largo de sus 20 etapas y 4.000 metros de altura acumulada (la altura total no supera los 125 metros sobre el nivel del mar), atraviesa una gran variedad de terrenos, pueblos, montes, ciudades, calas y playas.

Aunque no vayas a pasarte 20 jornadas caminando la circunferencia de Menorca, puedes elegir uno o dos tramos para experimentar de un modo diferente, al menos en parte, la isla.
Mi recomendación: el que va de Punta de Artrutx a Cala en Turqueta (13 kilómetros de dificultad media) o el que va de Cala en Turqueta a Cala Galdana (5 kilómetros de dificultad fácil).
8. Prueba la gastronomía de Mahón
Puede que hayas leído hasta aquí pensando: todo muy bonito, pero, ¿y para comer? ¿No hay nada? Vale, que ya te habrás dado cuenta de que viajar a Islas Baleares no deja a nadie insatisfecho.

Mahón es la capital menorquina, una pequeña ciudad de edificaciones coloridas famosa por su puerto, y por su comida.
Además de disfrutar de un plato de caldereta de langosta, una cazuela de oliaigua o una buena raya al horno, no puedes dejar Menorca sin hartarte (y aprovisionarte para tu vuelta a casa, claro) del famoso Queso Mahón.
Se trata de un queso de leche de vaca, con denominación de origen, que obtiene su particular sabor salado por la brisa marina presente en la hierba de la que se alimentan las vacas.
Experiencias en Formentera
9. Visita las playas de Ses Illetes y de Llevant
Formentera es una de las Islas Baleares más pequeñas: apenas 83 km2 de superficie.
Pero entre sus acotadas fronteras se encuentran algunas de las playas más cristalinas del archipiélago. Por su tamaño, las excursiones de un día desde Ibiza o Mallorca son muy populares.

Mi recomendación: las playas vecinas de Ses Illetes y de Llevant, en el norte de la isla, que componen una larga extensión de arena blanca acariciada por el Mediterráneo por el este y el oeste.
Sin duda, una de las mejores cosas que hacer en tus vacaciones en Baleares.
10. Los faros de Formentera
Qué mejor que terminar tu aventura en las Islas Baleares que recorriendo la historia por los senderos de la Ruta de los Faros de Formentera.

Este recorrido une a los 3 grandes faros de la isla: el de La Mola en el este, construido en 1861; el de Cap de Barbaría en el oeste, construido en 1972; y el de La Savina en el norte, el menos conocido de los 3.
Como ves, ¡viajar a Islas Baleares es toda una experiencia que no olvidarás!
Tanto si quieres pasarte quince días bajo el sol, como si buscas experiencias que se te queden grabadas en la piel, este hermoso archipiélago español bañado por el mar Mediterráneo no te decepcionará.
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