12 Estaciones de tren más bonitas de España y Europa

¿Sabes cuáles son las estaciones de tren más bonitas de España y de Europa?

Para muchos, las primeras estaciones de ferrocarril son como las catedrales de la arquitectura del hierro. En el siglo XIX fueron una tipología de edificio tan importante para la época como lo fueron esos grandes templos católicos en la Edad Media.

Y para suerte de los viajeros actuales, hoy están al alcance de todos, tanto si se emplean como puerta de entrada a una ciudad o como una simple parada en una ruta turística.

Por eso, en las siguientes líneas te muestro algunas de las estaciones de tren más increíbles de España y de Europa en las que merece la pena pasar un rato y realizar unas buenas fotos.

Las estaciones de tren más bonitas de España

Hay muchas estaciones llenas de encanto y belleza en España, gestionadas en su mayoría por Adif.

Y gracias al desembarco de los trenes de alta velocidad de bajo costo en nuestro país, puede que en los próximos tiempos te toque salir, llegar o hacer trasbordo en alguna de ellas.

En primer lugar, se pueden citar las de Madrid. Y hablamos en plural porque la capital española tiene varias de gran interés.

Estación de Atocha

La estación de tren de Atocha es el epicentro de la red de alta velocidad de España.

Merece la pena visitar su edificio antiguo, con una extraordinaria fachada de hierro y vidrio en el exterior y un hermoso jardín tropical en el interior.

Las esculturas Día y Noche de Antonio López en la entrada a la nueva terminal son también muy interesantes.

Estación histórica de Delicias

La estación de tren de Delicias es hoy sede del Museo del Ferrocarril y su estructura original, concluida en 1880, está muy bien conservada. Alberga numerosos trenes antiguos.

Estación de Príncipe Pío

Aunque sigue acogiendo trenes de Cercanías, el interés de la estación de tren de Principe Pío está en sus dos usos muy diferentes, pues hoy es un centro comercial y un gran teatro

Estación de Francia

En Barcelona tampoco faltan las estaciones hermosas. 

La estación de tren de Francia es elegante por su diseño y por sus ricos materiales, especialmente en las áreas de espera. Además, su zona de andenes presenta una original forma curva. 

Estación Norte de Valencia

Más monumental es la Estación Norte de Valencia, con una imponente fachada y una gran marquesina interior. Se usa, principalmente, para trenes de Media Distancia y Cercanías, por lo que siempre tiene una gran afluencia de viajeros.

Estación de Toledo

Más exótica es la Estación de Toledo, recientemente recuperada del olvido para dar servicio a la línea de AVE Madrid-Toledo. Su edificio es de estilo neomudéjar, con el exterior de ladrillo y el interior de azulejos inspirados en la arquitectura histórica de la ciudad. 

Estación Internacional de Canfranc

Por último, otro ejemplo que se puede citar es la Estación Internacional de Canfranc, en la provincia de Huesca: en este caso, no solo por su imponente edificio de aire señorial y su historia, sino sobre todo por el precioso entorno pirenaico que la envuelve.

Las estaciones de tren más bonitas de Europa

El Viejo Continente también cuenta con estaciones de enorme belleza, en algunos casos con edificios muy diferentes a lo que estamos acostumbrados a ver en España.

Estación Central de Ámsterdam

Una de las primeras que se puede citar es la Estación Central de Ámsterdam, de dimensiones colosales, pero perfectamente integrada en el centro de la ciudad y en los canales que la rodean.

Estación de St. Pancras en Londres

De dimensiones parecidas es la de St. Pancras en Londres, con una enorme torre del reloj que recuerda a las clásicas abadías británicas.

Además, los fans de Harry Potter la reconocerán porque sale en una de sus películas, aunque con el nombre de la vecina King’s Cross. 

Estación de Porto Sao Bento en Oporto

Más pequeña, pero muy pintoresca es la Estación de Porto Sao Bento en Oporto. Te sorprenderá el vestíbulo central decorado con centenares de metros cuadrados de azulejos en las paredes.

Estación Central de Milán

Otro ejemplo interesante es la Estación Central de Milán. Se trata de uno de los edificios más icónicos de la arquitectura ‘imperial’, pues se concluyó durante el mandato de Mussolini bajo los preceptos que buscaba el nuevo régimen: grandiosidad y eternidad.

El resultado es un edificio de dimensiones imponentes y ricos materiales, con decoración alusiva a las provincias italianas.

Estación Central de Berlín

Pero no todas son estaciones clásicas de la arquitectura del hierro o de la época ‘imperial’ de entreguerras. También hay construcciones modernas que te dejarán con la boca abierta.

El mejor ejemplo de ello es la Estación Central de Berlín, construida con motivo del Mundial de Fútbol de 2006. Fue diseñada por el prestigioso estudio Gerkan, Marg und Partner sorprendiendo por sus líneas vanguardistas y su luminosidad.

En definitiva: en España encontrarás estaciones de tren de enorme belleza, desde las más ajetreadas como Atocha en Madrid y la de Francia en Barcelona, hasta la más evocadora como la de Canfranc.

Y si viajas a ciudades extranjeras como Oporto o Ámsterdam, no olvides reservar parte de tu tiempo para conocer la estación principal. ¡Merecerá la pena!